En el 80% de los casos, ambas bolas de los extremos de una barra son desenroscables.

Para ‘abrir’ tu joya, desenrosca una de las bolas en sentido antihorario con cuidado.

Si va demasiado dura no la fuerces. Intenta hacerlo poniéndote unos guantes de goma.

• Si tampoco se abre, deja tu joya en el congelador durante unos 20 minutos. Cuando la saques, intenta desenroscarla otra vez con los guantes de goma puestos. La temperatura fría impactará el metal durante unos segundos, haciéndolo más fácil de desenroscar.
  
  
• Algunas joyas (como las del pezón o barras industriales) tienen una de las bolas fijadas a la barra. La intención es asegurarnos de que cuando ambas bolas estén enroscadas, los elementos decorativos miren en la misma dirección. En este caso no fuerces la bola fija, solo enrosca/desenrosca tu joya por la bola desenroscable.
  
  
• En cuanto a barras para la oreja, lo más común es que solo una de las bolas sea desenroscable. El otro extremo esté probablemente encolado. En ese caso, desenrosca solo la bola. No sujetes la joya por la parte encolada cuando desenrosques la bola. En vez de eso, sujeta la joya por la barra.